Me llamó poderosamente la atención el título de su libro, QUIET: The Power of Introverts in a World That Can’t Stop Talking (El poder de los introvertidos en un mundo incapaz de callarse).
Y después me conquistó con su charla en TED sobre el mismo tema.
Tanto que compré su libro para Kindle y ahora forma parte de la pila de lecturas de mi mesilla de noche (una más, My God).
Aún me queda mucho libro por leer y quizá cuando lo termine me dé por escribir una reseña.
De momento me apetece decir aquí unas cuantas cosas que me ha enseñado:
> Ser introvertido NO es algo malo aunque tenga mala prensa.
> Ser introvertido NO significa ser tímido ni tener miedo a tratar con la gente.
> Ser introvertido NO significa NO ser extrovertido, pues nadie es 100% ninguna de las dos cosas. Por eso es más correcto decir que alguien tiene tendencia a la introversión o a la extroversión.
> Si tienes tendencia a la introversión significa que prefieres el silencio como estímulo para sacar lo mejor de ti. No significa que quieras vivir en soledad o que no te guste la gente, sólo que en momentos de silencio eres capaz de trabajar, crear, pensar, aportar mucho más que en momentos de ruido y de mucha gente alrededor. Al igual que quien tiene tendencia a la extroversión saca lo mejor de sí mismo cuando está interactuando con gente.
> La sociedad actual fomenta y premia la extroversión en una falsa creencia de que es imprescindible para ser un líder hoy día. Gandhi, Obama y Einstein, todos introvertidos, son ejemplos de lo contrario.
> La persona que tiende a la introversión suele ser una excelente "escuchadora" mientras que la persona que tiende a la extroversión suele ser una excelente "habladora". En este mundo cada día se habla más y se escucha menos. Tal vez nos iría mejor si invirtiéramos la tendencia.
Cada vez estoy más convencida de que la empatía, valor de escasa implantación en la sociedad, resulta crucial en nuestras vidas. No sólo para llevarnos bien con nuestro entorno y vivir relaciones más plenas y felices, sino, yendo más allá, para construir una sociedad mejor, más tolerante, más respetuosa con el prójimo y más generosa.
La armonía, en definitiva, depende mucho de saber escuchar, de ponerse en los zapatos y en la piel de quien tenemos al lado.
Un poco de introversión no nos viene nada mal. ¿Hacemos la prueba?
Completamente de acuerdo, qué te voy a decir yo que soy "hipertendente" a la introversión. Hay estudios que demuestran que los extrovertidos no son más felices que los introvertidos, como suele creerse, la diferencia entre ambos reside en que unos y otros encuentran las felicidad por caminos diferentes.
ResponderEliminarY a veces, para poder mirar hacia el otro es necesario mirar primero a uno mismo...
En esos diferentes caminos esta el quid de la cuestión. Ser extrovertido no es mejor ni peor que ser introvertido. Sólo distinto.
EliminarUn beso!
Oh!! Muchas veces me han definido -y yo misma- como tímida. Pero es cierto, que la extroversión sólo sale a la luz con gente a la que ya conozco, y también a través de las letras escritas. La introversión no es malo, tampoco es bueno, claro, pero como todo, hay que buscar el equilibrio. Creo que lo del silencio, o la timidez es bueno, y se sacan muchas mejores cosas que cuando se está todo el rato hablando (cosas sin contenido), o tratando de ser alguien que no eres.
ResponderEliminar¿No crees?
Sí, sí lo creo, para ser feliz hay que ser uno mismo. No digo que haya que conformarse con todo lo que tiene uno, creo que siempre se puede mejorar en algún aspecto, pero intentar ser otro...no mola.
EliminarUy Bego... Qué bien me viene leer esto hoy.. que ando con mis encrucijadas vitales y filosofeando, jajaja. Cosa que me ocurre frecuentemente en vacaciones...
ResponderEliminarYo también me considero más bien introvertida... En las reuniones no soy el alma de la fiesta nunca... Suelo ser observadora y un poco retraída... Gano con las distancias cortas ;))
Siempre lo había considerado un defecto, un punto negativo, una barrera que superar... Hoy gracias a ti voy a aprender a mirarme de otra forma... con mis contradicciones.
Un besazo y enhorabuena de verdad, porque no sé como lo haces, pero nunca me dejas indiferente.
Ya, cuando he leído tu post he pensado que éste te iba a gustar ;-)
EliminarPara nada es un defecto ser introvertido. Es lo que nos quieren hacer creer. Por eso ha llegado esta mujer, Susan Cain, a abrirnos los ojos.
Muchas gracias, me gusta mucho que lo que traigo aquí os sirva de algo.
Un besazo para ti también
Yo soy bastante extrovertida, creo que cada día menos, pero al principio me cuesta mucho. En cualquier caso, se sea extrovertida o introvertida, creo que es muy importante lo que dices sobre escuchar. Además con demasiado ruido no se oye nada, de la mano del silencio yo creo que llega el equilibrio. Un saludo
ResponderEliminarCada vez echo más de menos el silencio porque parece que siempre tenemos que tener ruido alrededor y no nos damos cuenta de que lo necesitamos.
EliminarUn saludo y gracias por tu comentario!
Que interesante Bego... muchas veces me culpo por ser introvertida en algunos aspectos y ocasiones... en el colegio era muy tímida y lo sufrí mucho... ahora leyéndote le doy una vuelta de tuerca... comparto que en definitiva lo que importa es saber escuchar y ponerse en los zapatos del otro...
ResponderEliminarBesazos genia!!!
La timidez, más bien la introversión, es difícil de llevar, cuesta quitársela. Con el tiempo se consigue disimular muy bien. Lo que cuenta el libro es que no hay que sentirse mal o peor por sufrirla, ni hay que intentar desprenderse de ella. Hay que convivir con ella y sacarle todo su jugo.
EliminarUn besazo!!
A mí me ocurre al revés de las demás. Todos piensan que soy muy extraovertida, pero en el fondo no lo soy para nada. Me encanta ver escuchar, y amo el silencio. Necesito estar sola para reflexionar.
ResponderEliminarMe ha encantado tu reflexión, como siempre.
Un besazo
Suele pasar eso, un día hablé de ello en un post sobre las etiquetas. Sé de sobra que te encanta escuchar, lo demuestras cada día ;-))
EliminarMuchas gracias, me alegro de que te haya gustado.
Un besazo
Me parece muy bien esto que has escrito hoy, ya que siempre se me tacha de borde, desagradable, y simplemente es que soy eso, introvertido.
ResponderEliminarMuchas veces prefiero estar un ratito más conmigo que en otros sitios.
Salu2
Pues sí, es habitual tender a tachar de borde a los introvertidos cuando suele ser todo lo contrario ;-)
EliminarGracias por la visita!
Es un video muy interesante. Yo también me he sentido así de rara al preferir quedarme leyendo un libro :D
ResponderEliminarDebe ser un libro estupendo para leer, porque tu post ha estado muy bien.
El libro está muy bien la verdad, contaré más cuando lo termine. Leer libros mola mucho, al igual que las charlas animadas, una cosa no quita la otra ;-)
EliminarAhora recuerdo por qué no comenté... Porque no me único en ningún lado. Soy habladora pero adoro escuchar, lo paso mal en publico pero socialmente saco lo mejor de mí... El silencio me inspira pero también me aterra, no digamos la soledad. Necesito un poco de cada cosa, y lo único que sé es que no me gusta que me cueste tanto estar con mucha gente.
ResponderEliminarEl signo de la contradicción. :((
Tendré que leer el libro, hablar contigo o con un coach. Mi no entenderme.
Besis