Sonrío. Acaba de pasar por delante
un trozo de belleza.
La próxima vez estaré más atenta
para cogerlo y llevarlo a casa
y sentarlo junto a mí en el sofá.
Le haré mimos, le inventaré fantásticas historias
que nunca serán escritas,
le pondré perfume.
Pero, ¿qué está pasando?
Todo se ha estropeado.
Mis ojos bajan a las profundidades
de ninguna parte
sin escuchar mis súplicas
Sólo veo grises y malvas
siento la humedad de la bruma,
percibo el lugar donde nunca quiero estar
me atrapan sus tentáculos malditos.
La angustia se viste con mi cuerpo.
Quiero gritar.
Y entonces escucho un piano desde el mar,
la brisa me pinta la cara
el calor del mediodía me calma
me aviva la increíble soledad de la arena blanca.
Me quedo sin habla.
Respiro gotas de sal
y acaricio las olas del viento.
Estoy en el rincón perfecto.
El instante en mi paladar
amenaza con tragarme
antes de llegar a mi bolsillo.
Vuelvo a la ciudad
a sus caminos sin destino
a sus habitantes sin alas
a sus edificios sin alma.
El tiempo se revoluciona
avanza y no descansa
dejando huellas y deseos
posibilidades y heridas
temblores y realidad.
Nubes negras como cuchillos
se enfrentan al sol
Y ganan la batalla
Grandes gotas de lluvia
lo invaden todo,
hasta las venas de los hombres que cruzan las aceras.
En una hora
el agua limpia el ambiente
llena los huecos,
da a luz el sol
Tras la fluida tristeza
el cielo se mancha de miles de colores
En el aire bailotean carcajadas
Los niños felices chapotean la tarde.
Y yo, como si fuera una rosa tratando de ser mujer,
doy un gran paso adelante,
me elevo
floto ensimismada,
crezco
Y vuelvo a sonreir.
Qué belleza.
ResponderEliminarY qué importante es APREHENDER esos momentos de éxtasis estético, reconocer cuando llega ese instante, esa sensación inolvidable y atesorarlo en el desván de nuestros recuerdos.
Me ha gustado muchísimo... Me reitero en tu talento.
:-))) me alegra saber que has entendido lo que quería transmitir tal y como yo lo pensaba.
Eliminar¡Muchas gracias!
Oh, increíble!
ResponderEliminarMe ha hipnotizado su lectura.
Muchísimas gracias, me encanta que te hipnotice ;-)
EliminarGenial, precioso....te admiro.......yo no he sido jamás capaz de escribir cosas tan bellas.
ResponderEliminarJo, me estáis haciendo sentirme muy bien con todo lo que me decís. Me ha dado siempre mucho corte publicar estas cosas. Que me digas que me admiras me deja sin palabras. Muchas gracias Bea.
Eliminar^_^ muchas gracias por la visita
ResponderEliminarUau, tremendo! "Respiro gotas de sal", me ha encantado Bego, por un momento he abandonado el sofá, la tablet, Madrid, el trabajo... y me he transportado a mi infancia con olor a salitre y mar.
ResponderEliminarMaravillada me dejas con tu comentario. Que uno de mis poemas sea capaz de trasladar a alguien a su infancia... En fin... Es alucinante para mí. Muchas gracias
EliminarDios mío, Bego, erizadita me tienes desde esta mañana. Quería volverte a leer y tomarme mi tiempo. Me encanta cómo escribes. Qué lujazo para los sentidos esto que describes... Casi que me ha venido el olor a sal, mis recuerdos en el mar mediterráneo, el paso del tiempo, la vuelta a la rutina y a la ciudad sofocante... Impresionante. Me tienes loca.
ResponderEliminarUn abrazo
Tenía pendiente contestarte, me encantó leer tu comentario, muchísimas gracias. Cuando lees comentarios así te das cuenta que merece mucho la pena seguir escribiendo ;-)
EliminarUn beso
¡Jo! ¡Qué bien escribes!
ResponderEliminarAdmiro como enganchan tus escritos
Un beso,
;-)) Muchísimas gracias, que me digas que me admiras es todo un honor para mí.
EliminarUn besazo